Las redes sociales están saturadas con reclamos y
chistes relacionados con una sentencia por delito de peculado contra el ex
ministro de Deportes, Raúl Carrión que hace seis años, ya en el correísmo,
renunciaba a su cargo por corrupción, mientras su asesor era capturado con 200
mil dólares en su bolsillo e intentaba comerse varios cheques para desaparecer
las pruebas.
chistes relacionados con una sentencia por delito de peculado contra el ex
ministro de Deportes, Raúl Carrión que hace seis años, ya en el correísmo,
renunciaba a su cargo por corrupción, mientras su asesor era capturado con 200
mil dólares en su bolsillo e intentaba comerse varios cheques para desaparecer
las pruebas.
Habían manipulado 20 contratos con el Estado
para la construcción de escenarios deportivos vinculados a los Juegos Nacionales
de Macas de 2008 y los acusaron por el sobreprecio en edificios construidos en
Ibarra, Morona Santiago y Esmeraldas.
La condena de Carrión se redujo a tres meses
y una multa de 190 dólares. En cambio, una condena de 18 meses se aplicó para el
asambleísta Cléver Jiménez y el activista Fernando Villavicencio; mientras seis
meses para Carlos Figueroa. Además, tendrán que pagar 140 mil dólares de
indemnización a favor de Rafael Correa, quien los demandó por injurias
calumniosas.
El Gobierno repite la desatención histórica a
las comunidades indígenas y la política de extracción de recursos convencional,
cuando opta por colocar unidades de policía en el territorio Sarayaku para
perseguir políticos, mientras olvida que esa zona requiere de vías, salud y
educación bilingüe. Las petroleras y mineras triunfan tras un régimen que avala
la explotación de Tambococha y Tiputini y menosprecia las demandas
comunitarias.
Después del rechazo a consulta popular para
explotar el Yasuní queda el reclamo internacional y la organización de nuevas
movilizaciones. Esta semana mil indígenas de Imbabura y del norte de Pichincha
llegaron al centro de Quito para reclamar proyectos para el riego y consumo
humano y queda pendiente otra marcha por la vida y el agua. Pero, ¿serán
escuchados?
El caso Carrión y la sentencia para los
‘comecheques’ colocan sobre el tapete que se incumplen convenios, dilapidan
recursos, violan contratos, incumplen promesas y dividen a las comunidades bajo
una insensata política que aplica más petróleo y menos agua. Más corrupción y
menos diálogo.