jueves, 31 de octubre de 2013

Mandiles blancos : Opinión : La Hora : Manabi

Mandiles blancos La penalización de la mala práctica profesional amplía la polémica desatada en torno a la aprobación del Código Orgánico Integral Penal. Esta vez, persisten inconsistencias de forma y contenido sobre el trabajo que realizan los médicos. Los voceros del sector de la salud coinciden en alertar sobre los riesgos para sus usuarios y pacientes. La opinión pública se confunde frente a una normativa redactada con vicios represivos y poco debatida entre los gremios involucrados en los procesos diarios de atención al público.

Los galenos de los hospitales Pablo Arturo Suárez y Eugenio Espejo suman adeptos que incluyen también al gremio de enfermeras. En las rejas del Manuel Ignacio Monteros, de Loja, y José Carrasco Arteaga, de Cuenca, cuelgan mandiles blancos porque ahora se visten de negro en señal de luto, como un símbolo de rechazo para exigir un análisis coherente a la propuesta reformatoria penal que se instalará como ley.

La gestión de la salud, sea del sector público o privada, tendrá que anclarse a la misma normativa. No obstante, en rigor, los actos dolosos en la prestación de servicios o la imprudencia grave en la atención de casos tendrán que ser penados. Pero, es distinto cuando no se delimita con claridad la negligencia del ejercicio profesional sobre una estructura médica especializada.

La aplicación de un Consejo de Salud, cuya tarea implicaría regulaciones técnicas y profundización en la investigación científica, fundamenta el argumento de un amplio sector de los protagonistas de la salud pública respecto al dolo y a la negligencia grave. Las sanciones administrativas vigentes se establecen en el Código de la Salud.

La espera de un órgano para un trasplante, la expectativa de cirugías de alto riesgo, la atención de servicios de emergencia se verán mermados en calidad y cantidad ante la posible sanción para el personal de salud por el delito de mala práctica que representaría cinco años de cárcel para cuando entre la ley en vigencia. La opción política para la rectificación de la norma penal es la vigilia permanente por el veto.

Sigue latente la unilateralidad que evita el debate para despenalizar el aborto por violación, acción entendida por el oficialismo como deslealtad partidista, traición ideológica e incluso contradicción con los principios morales establecidos. Con mandiles blancos y guantes blancos se están frenando las imposiciones.

lunes, 21 de octubre de 2013

Visita al Aguarico 4 : Opinión : La Hora Noticias de Ecuador, sus provincias y el mundo

Visita al Aguarico 4
Un grupo de editorialistas visitamos Sucumbíos por una invitación de la Secretaría de Comunicación. El pozo Aguarico 4 se ubica en la zona norte del campo Shushifindi. El recorrido comprendió la observación a un pantano de crudo construido durante la explotación de la empresa Texaco, que operó allí desde 1964 a 1990. Ahora, el sitio está cubierto por vegetación, agua de lluvia y metales pesados que se mezclan y, a manera de desfogue, terminan en el río Aguarico.

Los técnicos de Petroamazonas y el Ministerio de Ambiente explicaron que esta piscina fue abandonada sin pasar por un proceso de remediación durante 17 años, mientras el pozo tenía la función de reinyectar agua en formación, pero no para extraer crudo. En la Amazonía, Texaco operó 221 pozos, entre 1964 y 1992,con unas mil piscinas asociadas, que evidencian mala práctica ambiental. El plan de remediación recayó sólo un 35% en Texaco, mientras que el 65% asumió la entonces estatal CEPE, según un acuerdo firmado durante el gobierno de Durán Ballén.

El convenio otorgó ventajas y excusas para incumplir los parámetros de remediación. Texaco habría colocado tierra encima de fuentes contaminadas o derrames y drenados tóxicos en ríos y esteros. El gas natural se habría quemado en antorchas al aire libre sin prevención alguna. Incluso, con derrames provocados en vías lastradas.

Desde 2001 Texaco se fusionó con Chevron, segunda empresa petrolera de Estados Unidos y séptima del mundo, hoy heredera de las demandas de pobladores desde hace 20 años, por daños en casi 2 millones de hectáreas y la contaminación de 15.834 millones de galones de agua tóxica que causaron la expansión del cáncer entre las comunidades. De su lado, Chevron planteó juicios por conspiración y extorsión contra indígenas y colonos. La firma niega su responsabilidad ambiental, pues logró un acta de finiquito durante la administración de Mahuad que la libera de cualquier culpa e impacto.

Una indagación de la Fiscalía de 2004 establece la responsabilidad de los exfuncionarios Giovanni Rosanía, Hugo Jara Román, Jorge Albán Gómez, ex subsecretario de Protección Ambiental del Ministerio de Energía y actual vicealcalde de Quito; Patricio Izurieta, director de Protección Ambiental y Patricio Maldonado, jefe de Protección Ambiental de Petroecuador; Ricardo Reis Veiga y Rodrigo Pérez Pallares, representante de Texpet, la firma contratada por Chevron para actividades de remediación. Entre bochornos y más denuncias, que atañen a ex funcionarios y gobiernos se procedió al retorno a Lago Agrio y luego a Quito.


lunes, 14 de octubre de 2013

No hay cárcel pa’tanta gente : Opinión : La Hora Noticias de Ecuador, sus provincias y el mundo

No hay cárcel pa’tanta gente
El nuevo Código Orgánico Penal Integral intensifica la criminalización. Plantea el enjuiciamiento penal contra personas jurídicas, nuevas formas de delito y acumulación de penas de hasta 40 años: femicidio -crimen en contra de mujeres-, sanciones por violencia en los estadios, enriquecimiento ilícito de los funcionarios públicos. En materia tributaria se aplica la defraudación a través de multas desorbitantes, decomisos, clausuras y la preferencia del Estado sobre los activos de las empresas condenadas.

Se registra la extinción de empresas, en caso de un delito consumado, pero sin propuestas sobre el futuro laboral de los trabajadores. Antes, los representantes de las empresas y las personas jurídicas sólo tenían sanciones civiles y administrativas, no penales.

El documento tal vez carece de una aplicación directa con la realidad social y económica del país. Las sanciones afectan a ciertas políticas emprendedoras empresariales por los altos castigos estipulados y pueden alejar la inversión externa. Sin embargo, quedan en evidencia algunas presiones para intentar sacar al país de la lista negra del Gafi, pues se incluyeron delitos como el decomiso de bienes, fondos y activos provenientes de acciones ilícitas: lavado de activos y el financiamiento del terrorismo.

El texto incluye cárcel para quien cause pánico económico y, reclusión de 30 días a 5 años, para quien no pague la afiliación al seguro social, con multas de entre 25 a 50 remuneraciones básicas. Se estipula la cárcel por mala práctica profesional, pero sin observar cómo esto puede incidir en la actitud de los médicos para su ejercicio.

El documento tiene 743 artículos y entrará en vigencia en 90 días después de su publicación en el Registro Oficial. Con poca deliberación en la opinión pública, una justicia bastante politizada y sin propuestas claras sobre la rehabilitación social, se aplicará un instrumento legal que incrementará el hacinamiento en las cárceles.

El control de medios de comunicación está a cargo de Carlos Ochoa, quien asumirá en la misma lógica de la sanción sus funciones. Vigilar y castigar forma parte del nuevo pragmatismo sancionador.

lunes, 7 de octubre de 2013

Involución ciudadana : Opinión : La Hora Noticias de Ecuador, sus provincias y el mundo

Involución ciudadana
El pragmático discurso revolucionario se ha trastocado en involución ciudadana. El Estado aplica un aparato político de control policial hacia los opositores ecologistas sumado a una intensa campaña propagandista de descrédito. Retrocede la democracia. Cualquier intento de detener la consulta popular y clarificar una decisión suprema sobre la explotación petrolera en el Parque Yasuní, sólo evidencia más la involución maniquea y contradictoria del populismo obsoleto vigente. El momento actual es muy parecido a los modelos fascistas del siglo pasado.

El uso de imágenes de una niña de tres años, con el nombre de La Megan, para repotenciar el recuento de hechos bochornosos del pasado 30 de septiembre de 2010, plasma la voracidad de un régimen dogmático, preocupado por enclaustrar su versión histórica bajo su único argumento de golpismo. La balacera en una zona hospitalaria consta como un delito de lesa humanidad en el esqueleto de la jurisprudencia internacional sobre Derechos Humanos. Este episodio no se contempla en la argumentación oficial.

Tampoco se detalla la provocación a militares y policías dentro de cualquier proceso indagatorio sobre aquellos acontecimientos que contabilizaron muertos y heridos. Esta vez, no se trata de la imagen de un niño para vender pañales, sino de un dardo mortal para diseccionar la sociedad entre quienes consideran las hipótesis del golpismo frente al amotinamiento laboral de las instituciones armadas.

La propaganda, sumada a la agresividad presidencial, delata una pérdida de energías transformadoras y persuasivas. Cada vez que el CNE demora los formularios para receptar firmas por la defensa del Yasuní, se muestra una involución al respeto ciudadano. Incluso por sobre el pensamiento de ambientalistas de las mismas filas gubernamentales que cuestionan en los pasillos la propuesta extractivista del Régimen pero sin mayor eco. La visualización unilateral de las agendas internacionales se ha tornado en instrumento de distracción.

La manipulación de la opinión pública consolida el retroceso a posibles propuestas y soluciones frente a la vulnerabilidad de los pueblos no contactados y de otros temas prioritarios. La hegemonía del poder pierde credibilidad a grandes pasos. Hace tiempo en los medios de comunicación había varias voces críticas y la pluralidad de pensamiento aspiraba a estar representada en el perfectible sistema democrático. Hoy esa utopía, en tiempos de involución, es impostergable.