domingo, 26 de mayo de 2013

Tercer período : Opinión : La Hora Noticias de Ecuador, sus provincias y el mundo

Tercer período
¿Qué cambió en los últimos seis años en el país? La reelección por tercera vez del mismo mandatario es un escenario paradisíaco de millones de hechizados ante un lirismo que confunde militancia con política caudillista. Ese accionar omnímodo copa los poderes Legislativo y Judicial para diseñar un hiperpresidencialismo de consumo masivo sin fecha de caducidad.

Una Asamblea aprueba todo, pero no fiscaliza a nadie, mientras intenta acabar a base de artilugios y plumazos de papel los atracos, mentiras y la corrupción de la esfera pública. Una especie de arte oficial que resuelve todo a punta de propaganda y sofismas cínicos, mientras disfraza la pobreza e inseguridad de las calles.

El préstamo Duzac, título de Pedro Delgado, ‘comecheques’, ‘narcovalija’, ‘hackeo’ del presupuesto en varios ministerios, sobreprecios de ambulancias y medicinas, contratos con empresas constructoras vinculadas al hermano del Presidente, intento de cierre de medios de comunicación, las constantes agresiones verbales a periodistas y críticos, las sentencias por terrorismo contra líderes políticos y unas 8 mil denuncias de corrupción sin investigar, son parte de los temas no resueltos.

Lo peor en seis años es que se pide fe antes que diálogo para gobernar, cuando son más evidentes los signos de prepotencia ocultos tras el unilateralismo en ciernes, que aísla el respeto por los derechos civiles y las libertades ciudadanas o de las minorías.
 

lunes, 13 de mayo de 2013

Reciclaje de cargos : Opinión : La Hora Noticias de Ecuador, sus provincias y el mundo

Reciclaje de cargos
Nueve ministros vuelven a ser reciclados, mientras late el mismo redoble de tambores del partido oficial que hace perenne la insistencia por jugarse a ciegas por el mayor y único proyecto verticalista de la historia actual.

En la política oficial persiste una imagen conservadora inamovible que aplica el maquillaje para no cuestionar sus tesis. La protección de un cuadro gubernamental entona la constante del régimen, cuyo eje es su discurso de tarimas y la diplomacia con parlantes, pero sin la renovación de prácticas cuestionables o la revisión de temas transversales como el exterminio del cóndor o del pueblo amazónico Tagaeri. No hay alternativas de debate o condiciones para abrir otra visión pública o indicios de una interacción novedosa con nuevos actores sociales. El nuevo periodo de gobierno iniciará el 24 de mayo con más grietas abiertas que cerradas en su camino y más contradicciones acumuladas. Ejemplos: una política exterior de incertidumbres y muy inexacta, con escasas propuestas para equilibrar la balanza comercial y la diplomacia del pantallazo. El Gobierno opta por no realizar modificaciones en las directrices, a veces cuestionadas, de la Cancillería cuyo discurso repite, en ocasiones, una salvación mesiánica regional maniquea.Es que en el esquema de la institucionalidad vigente, la del eslogan de la tal ‘revolución ciudadana’, ha duplicado el tiempo para mandar, imponer, ordenar y autorizar como principio una sola verdad impuesta por el poder dogmático. Por el contrario, se consolida la época del escenario estático con nula renovación ministerial, envuelto en una descripción macondiana. ¿Un asambleísta que se descamisa, se despeina, explota en furia contra el planeta entero y lanza improperios televisados para retar uniformados es nombrado Ministro de Cultura? ¿Ese es un guía adecuado para guiar manifestaciones culturales? ¿Por qué es necesario uniformar todo matiz desde el arte al deporte y hasta la comunicación, como si se tratara de sacramentos de una religión impuesta por un modelo totalitario? ¿Es suficiente saltar del Seguro Social a la cartera de Industrias o desde la Asamblea al Seguro Social? ¿Acaso hay algún giro certero de ideas consensuadas que enlacen con la participación de toda la sociedad civil?

Es evidente que falta reafirmar una planificación de políticas públicas con pluralismo que perduren al menos hasta la próxima década. Muchas decisiones demuestran que pesa mucho el pragmatismo antes que el bienestar de la mayoría. Cada vez parece más difícil revertir ciertos actos altisonates o tal vez erráticos porque se levantan sobre la base simplista del dogma absolutista.

domingo, 12 de mayo de 2013

Reciclaje de cargos : Opinión : La Hora Noticias de Ecuador, sus provincias y el mundo

Reciclaje de cargos 
 
Nueve ministros vuelven a ser reciclados, mientras late el mismo redoble de tambores del partido oficial que hace perenne la insistencia por jugarse a ciegas por el mayor y único proyecto verticalista de la historia actual.

En la política oficial persiste una imagen conservadora inamovible que aplica el maquillaje para no cuestionar sus tesis. La protección de un cuadro gubernamental entona la constante del régimen, cuyo eje es su discurso de tarimas y la diplomacia con parlantes, pero sin la renovación de prácticas cuestionables o la revisión de temas transversales como el exterminio del cóndor o del pueblo amazónico Tagaeri. No hay alternativas de debate o condiciones para abrir otra visión pública o indicios de una interacción novedosa con nuevos actores sociales. El nuevo periodo de gobierno iniciará el 24 de mayo con más grietas abiertas que cerradas en su camino y más contradicciones acumuladas. Ejemplos: una política exterior de incertidumbres y muy inexacta, con escasas propuestas para equilibrar la balanza comercial y la diplomacia del pantallazo. El Gobierno opta por no realizar modificaciones en las directrices, a veces cuestionadas, de la Cancillería cuyo discurso repite, en ocasiones, una salvación mesiánica regional maniquea.Es que en el esquema de la institucionalidad vigente, la del eslogan de la tal ‘revolución ciudadana’, ha duplicado el tiempo para mandar, imponer, ordenar y autorizar como principio una sola verdad impuesta por el poder dogmático. Por el contrario, se consolida la época del escenario estático con nula renovación ministerial, envuelto en una descripción macondiana. ¿Un asambleísta que se descamisa, se despeina, explota en furia contra el planeta entero y lanza improperios televisados para retar uniformados es nombrado Ministro de Cultura? ¿Ese es un guía adecuado para guiar manifestaciones culturales? ¿Por qué es necesario uniformar todo matiz desde el arte al deporte y hasta la comunicación, como si se tratara de sacramentos de una religión impuesta por un modelo totalitario? ¿Es suficiente saltar del Seguro Social a la cartera de Industrias o desde la Asamblea al Seguro Social? ¿Acaso hay algún giro certero de ideas consensuadas que enlacen con la participación de toda la sociedad civil?

Es evidente que falta reafirmar una planificación de políticas públicas con pluralismo que perduren al menos hasta la próxima década. Muchas decisiones demuestran que pesa mucho el pragmatismo antes que el bienestar de la mayoría. Cada vez parece más difícil revertir ciertos actos altisonates o tal vez erráticos porque se levantan sobre la base simplista del dogma absolutista.
 
Nueve ministros vuelven a ser reciclados, mientras late el mismo redoble de tambores del partido oficial que hace perenne la insistencia por jugarse a ciegas por el mayor y único proyecto verticalista de la historia actual.

En la política oficial persiste una imagen conservadora inamovible que aplica el maquillaje para no cuestionar sus tesis. La protección de un cuadro gubernamental entona la constante del régimen, cuyo eje es su discurso de tarimas y la diplomacia con parlantes, pero sin la renovación de prácticas cuestionables o la revisión de temas transversales como el exterminio del cóndor o del pueblo amazónico Tagaeri. No hay alternativas de debate o condiciones para abrir otra visión pública o indicios de una interacción novedosa con nuevos actores sociales. El nuevo periodo de gobierno iniciará el 24 de mayo con más grietas abiertas que cerradas en su camino y más contradicciones acumuladas. Ejemplos: una política exterior de incertidumbres y muy inexacta, con escasas propuestas para equilibrar la balanza comercial y la diplomacia del pantallazo. El Gobierno opta por no realizar modificaciones en las directrices, a veces cuestionadas, de la Cancillería cuyo discurso repite, en ocasiones, una salvación mesiánica regional maniquea.Es que en el esquema de la institucionalidad vigente, la del eslogan de la tal ‘revolución ciudadana’, ha duplicado el tiempo para mandar, imponer, ordenar y autorizar como principio una sola verdad impuesta por el poder dogmático. Por el contrario, se consolida la época del escenario estático con nula renovación ministerial, envuelto en una descripción macondiana. ¿Un asambleísta que se descamisa, se despeina, explota en furia contra el planeta entero y lanza improperios televisados para retar uniformados es nombrado Ministro de Cultura? ¿Ese es un guía adecuado para guiar manifestaciones culturales? ¿Por qué es necesario uniformar todo matiz desde el arte al deporte y hasta la comunicación, como si se tratara de sacramentos de una religión impuesta por un modelo totalitario? ¿Es suficiente saltar del Seguro Social a la cartera de Industrias o desde la Asamblea al Seguro Social? ¿Acaso hay algún giro certero de ideas consensuadas que enlacen con la participación de toda la sociedad civil?

Es evidente que falta reafirmar una planificación de políticas públicas con pluralismo que perduren al menos hasta la próxima década. Muchas decisiones demuestran que pesa mucho el pragmatismo antes que el bienestar de la mayoría. Cada vez parece más difícil revertir ciertos actos altisonates o tal vez erráticos porque se levantan sobre la base simplista del dogma absolutista.
 

sábado, 4 de mayo de 2013

Bochorno en Perú : Opinión : La Hora Noticias de Ecuador, sus provincias y el mundo

Bochorno en Perú : 
Las relaciones diplomáticas del país pasan por un álgido momento. La televisión peruana mostró imágenes confusas pero creíbles sobre la supuesta agresión del embajador del Ecuador, Rodrigo Riofrío Machuca, a dos mujeres en un supermercado de Lima. Varios diputados peruanos y la misma vicepresidenta, Marisol Espinoza, condenaron el hecho y pidieron su salida ante la gravedad del hecho y la presión de la opinión pública.

Hace rato la política exterior ecuatoriana arrastra varios entredichos: la famosa narcovalija descubierta en Italia o los extraños acuerdos comerciales con Irán y Bielorusia. Ahora Estados Unidos, que mantiene tensas relaciones con el régimen, llegó a pedir que se proteja la vida de periodistas, en particular de tres amenazados: Janet Hinostroza, Martín Pallares y Miguel Ribadeneira. Su vocero, Patrick Ventrell, pidió a Rafael Correa que respete la libertad de prensa por ‘los duros ataques e intentos de desacreditación’ a esos comunicadores y la garantía de su trabajo ‘sin miedo o temor a represalias’.

Esta vez, la actitud de un funcionario de cancillería ocupa amplios espacios de la prensa mundial que implican violencia de género. En los últimos meses se han registrado sucesivos hechos feminicidas y la acumulación de violencia intrafamiliar, los cuales condujeron a ampliar el debate político parlamentario y revisar la legislación en torno a las distintas formas de violencia contra la mujer. La versión de Riofrío se fundamenta en argumentos de defensa propia resueltos con una disculpa. El cuestionado funcionario tendrá que explicar su conducta a las mujeres peruanas y ecuatorianas y enfrentar los innumerables mensajes que piden su expulsión colocados en las redes sociales.

Más allá de interpretarse este acto como atípico e insólito, la ciudadanía requiere sanciones y disculpas desde las altas esferas del Gobierno y queda pendiente una reflexión autocrítica sobre el profesionalismo de los diplomáticos en su rol para representar a la nación así como la renovación de los embajadores de carrera cuestionados. Después de la aplicación de una reforma en Cancillería que enarbolaba el discurso de un recambio con aires populistas en los espacios diplomáticos, aún repican en la memoria masiva las expresiones del oficialismo que identificó a algunos embajadores como ‘momias cocteleras’.


¿Acaso el bochorno de Riofrío, ya no es de todos?