Réditos electorales : Opinión : La Hora Noticias de Ecuador, sus provincias y el mundo

Réditos electorales : Opinión : La Hora Noticias de Ecuador, sus provincias y el mundoProhibir la salida del país de un rival político acusándolo de evasor de impuestos y a otro calificándolo de ‘basura’ para rechazar antiguos acuerdos son síntomas del arranque de una ácida campaña electoral.
Comienzan los esfuerzos propagandísticos para desvirtuar las encuestas que elevan la credibilidad en la banca y la afiliación de un pacífico candidato que resultaría arrollador. Esas encuestas las rechazan los amigos del Gobierno incrustados en entidades de control.

Acusatorias de un CNE famoso por aplicar salidas en falso y dudas, que receptó millares de firmas falsas, recontó, filtró datos, reprogramó e inscribió los movimientos políticos para las próximas elecciones. Aunque sin fraude, los resultados electorales se logran con hechos y cumpliendo los compromisos asumidos, no con campañas publicitarias banales como las que nos abruman a diario.

Cualquier arrogante candidato, con poca capacidad de ejecución y conocimiento en seguridad, infraestructura, salud y educación, opta siempre por preocuparse más a promover la polémica nacional, que a asumir las urgencias ciudadanas; busca cortar las cintas de obras inaugurales, antes que fortalecer la mejor decisión nacional. Y cuando las promesas de cambio se diluyen, los opositores logran consolidarse y sacar provecho.

Resulta curioso que pocos cuestionen la decisión del Banco Central que obliga a transferir las remesas de los migrantes a través de sus cuentas, cuando la medida podría tratarse de un intento desesperado para captar liquidez y precautelar la dolarización hasta que concluya esta administración.

Un ejemplo para precautelar los réditos electorales, pues en Quito solo se aplica la falsedad genuina o la verdad selectiva que contiene tres supuestos con discurso incluido: nuevo aeropuerto, un parque de la ciudad y un metro, pero ninguna obra se cumplen sino para cuando el ‘candidato-presidente’ lo programe.

No obstante, cuando se expone ineptitud o lentitud, la culpa recae en un alcalde gobiernista que funciona como armadura para desatinos. Los exportadores y aerolíneas insisten en no cortar la cinta inaugural de la pista aérea hasta no terminar las vías de acceso; el parque no se construye ni el metro, porque el aeropuerto sigue allí. ¿Qué enseña todo esto? Que el oficialismo vive obcecado por la riña cotidiana y privilegia el interés político momentáneo sobre las reformas reales que necesita el país pero sin opositores audaces.